Muchas veces consideramos que la
diferencia entre la iniciativa privada y las organizaciones académicas es tan
grande que constituyen mundos distintos. Ya en otras ocasiones he comentado
porqué considero que el abismo no es tal, y que hay más coincidencias que
diferencias. De hecho, podemos apreciar esta similitud con el término con el
que Ikujiro Nonaka define a las empresas, las llama “organizaciones generadoras
de conocimiento”; un concepto familiar a un centro de investigación.
Su teoría organizacional se centra en que
las empresas no son productoras únicamente de bienes o servicios, sino más
importante aún, generan conocimiento constantemente y que, gracias a esa
generación continua, alcanzan el éxito. Los nonakistas
consideramos que para lograr esto, es necesario promover un proceso de
transferencia de conocimiento entre todos los componentes de la organización, y
por lo tanto, cuidar el entorno donde esto se da es fundamental. Incluso,
Nonaka considera que el activo más importante de las organizaciones no tiene
que ver con los bienes que produzcan, o la materia prima que utilicen, ni
siquiera con el capital económico. Es el conocimiento, y por lo tanto quienes
lo generan, comunican y administran. Así, el éxito de una empresa depende del
factor humano, de la confianza con que comparten el conocimiento y el
compromiso que se genera entre todos.
En una organización de este tipo, el
responsable de que la transferencia de conocimiento se dé de la mejor manera
posible debe tener la capacidad de cuidar el entorno, generar la confianza
entre el equipo de trabajo, asegurar el compromiso del grupo hacia el proyecto
y fomentar el cariño hacia la organización, pues estos cuatro elementos son los
pilares en los que se fundamenta un proceso de generación de conocimiento
efectivo. Este responsable no es un
capataz, ni un presidente, ni un jefe, ni siquiera es un gerente o un
administrador. Nonaka llama al líder de este proceso el Moderador, pues su
función no es corretear, presidir, mandar o administrar. El Moderador entiende
a su equipo, a su entorno y se asegura de que la transferencia de conocimiento
se lleve a cabo, cuida las relaciones entre los miembros talentosos, promueve
la superación de cada uno, conoce la dinámica organizacional y potencia las
aportaciones individuales y de conjunto para el logro de los objetivos y las
metas.
Si volteamos al sector académico podemos
ver en el éxito de sus comunidades la mano de estos líderes, moderadores de
entornos altamente calificados.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario